26 de diciembre de 2012

Testigos...

¿De verás que no habrá testigo al que llamar?

Cuando mi silencio se firme y mis pasos me retiren de lo que llamabas mundo.

No habrá voz o mano inocente que transpire el sentido de un recuerdo que nos guarde.

Repetirás cual letanía: ayer, ayer, ayer... cada vez más inaudible para que el olvido lo recoja.

Entregarás un nuevo rostro y elegirás una voz que tome del tiempo tu legado y te desdiga de ti misma.

Reclamarás un escudo que te esconda y un mañana que retire del mundo tus suspiros, que nacieron de inspiración.

Ligarás a esos huesos temblorosos el reclamo de un desvelo que te vista de un adiós.

Aventuras del eco llegarán reptando por los reinos de un ensueño y la suave piel se volverá escamada alertada por un escalofrío.

Sonrisas de hielo no te dejan ser feliz, y eso es fuego...para mí.

Se cierra la cesión, la noche ya se hizo sobre mis espaldas.

Sostuve entero el firmamento y tragué de las estelas el destino, tramé en su silueta lo eterno y juré vivir en ello.

Dejo a lo árboles gritando la verdad del amor, a los lobos representándola ante mi luna y a los mares rindiéndole oración incesante sobre aquella" orilla.

19 de diciembre de 2012

Quiero arroparme en mi infancia y volver a soñar.

Quiero creer que creo un día en que dejaré de querer.

Me rindo a la deuda de descubrir cada día el deber de una renovada libertad.

Me libero de ideas que ahogan el agua que respiro.

Aprender a bailar, a cantar y a entonar, es decir, a musicalizar, se me presenta como camino atractivo y necesario.

Desde un tiempo que acaricia mi niñez sé que tendré un husky siberiano que se llamará Fuego y una gata negra de ojos verdes que se llamará Noche.

Me palpita la mente cuando paseo por las bibliotecas y sus promesas.

Me mana el corazón de un no sé qué sin nombre cuando la naturaleza rodea mis sentidos. Hay instantes en los que percibo internamente que naturaleza es todo lugar del universo y, entonces, ese sentir se fraterniza con mis circunstancias.

Quiero saber amar a todo ser, pero aún estoy estudiando ese lenguaje esquivo.

Tiempo, eternidad, muerte, vida, fuego y hielo. Busco su sinonimia.

He caido tan bajo que aprendí a levantarme.

Agradecer es iniciarse eternamente en el amor.

Muerte es lo que haces cuando terminas de vivir. Los finales siempre fueron tan elevados como las historias que los traen.

"...yo amo los mundos sutiles/ ingrávidos y gentiles..."

Mis sueños pueden durar una vida y evaporarse en un instante.

Hay una sombra que me persigue, quiere revelarme, pero corro más que escucho.

De salud frágil otrora, hace tiempo que no enferma y se reafirma en que adora el frío. ¡El frío del Norte!

Sólo sé ser más rápido corriendo al intentarlo.

La vida no me vino para perderla en tiempo, me vino para ganarla en verdad.